Se avanza con la aprobación del Estatuto de la Autoridad Independiente de Protección del Informante. ¿Cuál es el próximo paso?
El Gobierno ha aprobado el Estatuto de la Autoridad Independiente de Protección del Informante como parte de las primeras medidas del Plan de Acción por la Democracia orientadas a combatir la corrupción. Como ya adelantamos en el artículo «Se aprueba el Estatuto de la Autoridad Administrativa Independiente de Protección del Informante«, este organismo garantizará la confidencialidad y protección de los denunciantes en casos de infracciones y corrupción dentro de organizaciones públicas y privadas, asegurando un marco legal robusto para la denuncia segura y efectiva en España. A continuación, revisamos los puntos principales del Estatuto y los pasos a seguir.
Estructura y funciones de la Autoridad Independiente de Protección del Informante (A.A.I.)
La A.A.I. se constituye como una entidad pública con autonomía e independencia, adscrita al Ministerio de la Presidencia. El estatuto destaca su estructura, que incluye:
- La Presidencia: Responsable de la dirección y gestión general, con autonomía para coordinar el canal externo de denuncias.
- Comisión Consultiva de Protección del Informante: Encargada de emitir recomendaciones y guías para asegurar el cumplimiento de la normativa.
- Departamentos de Protección, Seguimiento y Régimen Sancionador: La A.A.I. contará con departamentos para gestionar denuncias, implementar sanciones y monitorear la protección ofrecida a los informantes.
A través de este modelo organizativo, el Estatuto promueve un sistema de protección integral y sancionador para respaldar la lucha contra el fraude y la corrupción, un objetivo central de la Directiva Whistleblower.
Requisitos de las empresas y organizaciones
Según la Ley 2/2023, todas las organizaciones, tanto públicas como privadas, deben implementar canales internos de denuncia accesibles a empleados, proveedores y terceros relacionados. La A.A.I., a través de su función de supervisión, velará porque estas organizaciones cumplan con los estándares establecidos en la ley, incluyendo la confidencialidad, accesibilidad y seguridad de la información que se emita en el canal de denuncias. Esto implica que cada empresa debe asegurar que su sistema de denuncias esté alineado con los requisitos de la A.A.I., con particular atención a la protección de los informantes.
Régimen sancionador
El estatuto concede a la A.A.I. facultades sancionadoras sobre entidades que incumplan la normativa. Entre las posibles sanciones, se destacan multas significativas y otras penalizaciones que buscan garantizar el cumplimiento. Este marco sancionador tiene un papel disuasorio, promoviendo que las empresas implementen de manera estricta y diligente los canales de denuncia y la protección adecuada para los informantes.
Próximos pasos y acciones requeridas
Tras la aprobación del Estatuto, los siguientes pasos y acciones incluyen:
- Implementación de los Canales Internos y Externos de Denuncia: Las empresas y organizaciones deben acelerar la implementación de sistemas de denuncia internos en conformidad con la Ley 2/2023. La A.A.I. comenzará a supervisar que las organizaciones cumplan con estos sistemas, facilitando a los empleados y a terceros la presentación de denuncias seguras y confidenciales.
- Coordinación con Autoridades Europeas: Como parte de la Directiva Whistleblower, la A.A.I. trabajará en coordinación con otras autoridades de la UE para unificar los estándares de protección de denunciantes a nivel europeo. Esto incluye colaborar en casos transfronterizos y compartir mejores prácticas para mejorar la efectividad de los sistemas de denuncia.
- Desarrollo de Guías y Circulares: La A.A.I. emitirá circulares y recomendaciones para apoyar a las empresas y entidades en el cumplimiento de la ley, guiando la correcta implementación de los canales de denuncia y la protección de los denunciantes.
- Revisión y Supervisión de Cumplimiento: La A.A.I. tendrá la responsabilidad de monitorear el cumplimiento de la Ley 2/2023 en todas las organizaciones sujetas a la normativa. Esto incluye auditorías y revisiones periódicas para verificar la operatividad de los canales de denuncia y el cumplimiento con los principios de confidencialidad y accesibilidad.
- Concienciación y Capacitación: El Estatuto establece que la A.A.I. debe promover campañas de concienciación para informar a empleados y colaboradores sobre sus derechos y el proceso de denuncia, contribuyendo a la creación de una cultura de transparencia en las organizaciones.
Directiva Europea Whistleblower y adaptación en España
La Directiva Europea Whistleblower UE 2019/1937 establece la obligación de que todos los estados miembros implementen un sistema de denuncia y protección para los informantes. España, con la Ley 2/2023 y el reciente Estatuto de la A.A.I., avanza con retrasos hacia el cumplimiento pleno de estas disposiciones. La implementación de la A.A.I. alinea a España a países europeos que ya había creado sus organismos, como Francia y Alemania, fortaleciendo la cohesión europea en la lucha contra la corrupción.
No obstante, la tardanza en la implementación y transposición de esta directiva generó incertidumbre en las organizaciones, que han tenido que adaptarse a la normativa en cortos plazos y que ya están gestionando denuncias es sus organizaciones. Con la A.A.I. en pleno funcionamiento, las organizaciones en España podrán contar con un organismo de referencia que facilite y supervise el cumplimiento, ofreciendo seguridad tanto a los denunciantes como a las entidades que implementen canales de denuncia efectivos.
Conclusión
La aprobación del Estatuto de la A.A.I. representa un paso fundamental hacia la consolidación de un marco seguro y confiable para la denuncia de infracciones en España. Este avance no solo cumple con la Directiva Europea Whistleblower, sino que también fortalece la integridad y transparencia en las organizaciones. Las empresas deben estar atentas a las directrices de la A.A.I., adaptando sus canales de denuncia y asegurando la protección de los informantes para alinearse con los estándares europeos.
Con la supervisión de la A.A.I., el compromiso con la transparencia y la ética empresarial adquiere un papel central en la gestión corporativa.